Ha sido una gran bendición colaborar en esta nueva colección Entre Tus Manos y contribuir con el tema “Vaso Nuevo” el cual para mí es especial, ya que es uno de los cantos católicos que conozco desde muy pequeña, y el cual ha sido de gran inspiración en mi vida. Recuerdo que al finalizar la misa de mis XV años interpreté esta alabanza en agradecimiento a Dios por ese día tan especial.
Este canto, a su vez, me recuerda siempre una lectura que es muy significativa para mí, Jeremías 18,6: “Ustedes son en mis manos como el barro en las manos del alfarero. Yo, el Señor, lo afirmo.” Tal como lo dice el canto “Yo quiero ser Señor amado, como el barro en manos del alfarero”. Queda claro que Dios puede y quiere obrar en nuestra vida moldeándonos a su imagen, pero si hemos perdido su molde, él siendo el alfarero puede con su agua viva refrescar nuestro barro seco y volver moldearnos nuevamente a su imagen.
Otro de los aspectos que más me gusta de este canto es la invitación que nos hace para agradecer a Dios, reconociéndole como el dador de la vida que nos colma de su infinita misericordia. Bien dice San Pablo: “Den gracias a Dios por todo, porque esto es lo que él quiere de ustedes como creyentes en Cristo Jesús”-1 Tesalonicenses 5:18.
Por otra parte, me encanta trabajar con personas tan comprometidas con el evangelio y al servicio a los demás; para mí Juan Delgado es uno de ellos, quien además con sus dones y gran talento ha sabido darle un toque juvenil y muy contemporáneo a este canto, conservando la finalidad de transmitir el mensaje espiritual y el deseo de llevar a quien lo escuche a un momento de oración y encuentro con Dios.
Una vez más deseo que este canto sirva como sanación, consuelo y esperanza para su alma, recordándoles que la misericordia de Dios es infinita. La paz de Jesús.
—Azeneth